En el exilio
ESCUCHANDO LOS LATIDOS DEL CORAZÓN DE CRISTO
Nuestros corazones son complicados y fascinantes y todos nosotros seríamos más amables con nosotros mismos y encontraríamos nuestras vidas más interesantes si escucháramos con más regularidad sus latidos. Ése es también el secreto en nuestra relación con
Amores sin capacidad de expresión
Somos incapaces de encontrar las palabras que necesitamos para hablar, incapaces de expresarnos correctamente en el amor.
Sobre Artistas, Libertad, Reticencia y Santidad
A veces profundidad y sensibilidad están reñidas con creatividad y libertad.
Naturaleza de la Fe
Dios nos creó a su imagen y semejanza, y nosotros nunca hemos cesado de devolver el favor.
Lidiando con Dios
Desde Abrahán hasta Jesús vemos cómo las grandes figuras de nuestra fe no suelen decir fácilmente: ‘Hágase tu voluntad’.
Imágenes de cuaresma
¿Por qué marcamos aparte cuarenta días cada año para renunciar de forma voluntaria a algunos goces legítimos, a fin de prepararnos para Pascua?
Esforzándonos por el Tiempo-sabático en medio de las Exigencias de Teléfonos y Ordenadores
Un humorista bromeaba recientemente señalando que las tecnologías modernas de información han vuelto obsoletas un buen número de cosas; ejemplos más notables: las guías telefónicas y la cortesía humana.
Atormentando al gato (esclavos de la adicción)
Vivimos bajo constante presión, de fuera y de dentro, para ver y codiciar más, consumir más, comprar más y empaparnos más de la vida mundana. La presión para aumentar la dosis es constante e implacable. Pero aquí es precisamente donde se nos exige un ascetismo deliberado y reflexivo, tenaz e irrevocable.
Algunos Himnos o Lemas en Apoyo de la Justicia
Necesitamos arder de nuevo, porque nuestra esperanza ya no es fácil. Vivimos en una cultura de pesimismo y decepción en la que Pentecostés ya no puede darse por supuesto.
Lanzando los dados sobre el Evangelio
A primera vista, nos pareceremos a David frente a Goliat, no preparados para la tarea de derrotar a un gigante o de dar suficiente alimento a un mundo hambriento con ganas de comer.
El Ascetismo de la presión y del deber
Jesús fue una vez al desierto, durante cuarenta días y cuarenta noches, sin llevar comida y alimentación, ayunó. Se sometió voluntariamente a un ascetismo concebido como una ayuda que le impulsara a lograr un nivel más profundo de comprensión, amor y madurez.







