Distintos laicos hacen una breve sugerencia para la vida seglar. Cada uno contempla el Evangelio desde una dimensión de la vida laical.
Distintos laicos hacen una breve sugerencia para la vida seglar. Cada uno contempla el Evangelio desde una dimensión de la vida laical.
Recientemente, la NASA lanzó al espacio el James Webb Space Telescope, el telescopio mayor y más caro construido hasta ahora. Le costará seis meses viajar a un millón de millas de la tierra, encontrar su lugar de permanencia en el espacio y después empezar a transmitir imágenes a la tierra.
Distintos laicos hacen una breve sugerencia para la vida seglar. Cada uno contempla el Evangelio desde una dimensión de la vida laical.
Distintos laicos hacen una breve sugerencia para la vida seglar. Cada uno contempla el Evangelio desde una dimensión de la vida laical.
Jesús nació fuera de la ciudad, fuera de un hospital, fuera de una casa normal. Los Evangelios nos dicen que nació en un establo, fuera de la ciudad, porque no había lugar para ellos en la posada.
Distintos laicos hacen una breve sugerencia para la vida seglar. Cada uno contempla el Evangelio desde una dimensión de la vida laical.
Todo es de una pieza. Cuando no lo tomamos seriamente, pagamos un precio. El renombrado teólogo Hans Urs von Balthasar pone un ejemplo de esto. La belleza -afirma- no es algún pequeño “extra” que podemos valorar o denigrar según el gusto y el temperamento personal, como cierto lujo que decimos que no podemos darnos.
Ninguna comunidad debería desaprovechar sus muertes. El renombrado antropólogo Mircea Eliade sugirió esto, y su verdad se aplica a las comunidades en todos los niveles. Ninguna familia debería despedir a un miembro sin la oportuna reflexión, ritual y bendiciones.
Nunca he estado de acuerdo con algunos de mis amigos activistas que envían tarjetas de Navidad con mensajes tales como: ¡Que la paz de Cristo te inquiete! ¿No podemos tener un día al año para ser felices y celebrarlo sin que nuestras ya infelices personas sean agitadas con más culpa?
Dios -según parece- está a favor de los indefensos, los que no cuentan, los niños y los extranjeros sin recursos ni lugar al que ir. Por eso Jesús nació fuera de la ciudad, en un establo, inadvertido, fuera de toda fanfarria, lejos de todos los principales medios y lejos de todas personas y acontecimientos que se consideraban importantes en aquel tiempo, humilde y anónimo. Dios actúa así. ¿Por qué?
¿Qué hay todavía sin acabar en vuestra vida? Bueno, siempre hay mucho que queda inacabado en la vida de cada uno. En realidad, nunca hay nada acabado. Nuestras vidas -según parece- son simplemente interrumpidas por nuestro morir.