Se trata de eso, de creer que Dios es un tesoro de tal calibre que uno puede vender todas sus posesiones para adquirirlo, incluso el carné de pertenencia a «su» partido.
Enviar artículo
1. Amarás a Dios sin que se note demasiadoSe trata de eso, de creer que Dios es un tesoro de tal calibre que uno puede vender todas sus posesiones para adquirirlo, incluso el carné de pertenencia a «su» partido.