Invierno en Paraguay
Una vez más, Salvador León, nos sorprende con su pluma ágil y, sobre todo, con su alma poblada de amor a flor de vida. Salvador nos regala en este escrito un tapiz de ensueño que se adentra por los ojos – a veces humedecidos por la emoción- y llega a plasmarse en lo profundo del ser.
Despedida
Me llevaré el alma agradecida y arrodillada, mi gracia y mi pecado, la vida regalada y ofrecida.
Gracias, Jesús, porque cumples lo que prometes
Quiero dar testimonio de las maravillas que hiciste en mi vida y en la de mi familia
Dios me ama demasiado
Es poco el tiempo que doy a Dios en comparación con lo mucho que él nos ha dado.
A flor de piel
Así se muestran los hombres y mujeres cuyos testimonios de vida quedarán reflejados en los siguientes textos.
Recuerdos de Ypacaraí
Volveré a ti y tú me seguirás dando inocencia, sonrisas, plegarias, transparencia, horizonte y aliento.
Lita y Mirna
Hace tiempo que aprendieron a tomar la cruz de cada día, a saber que ‘cada día tiene su afán’.
Despedida
Me llevaré el alma agradecida y arrodillada, mi gracia y mi pecado, la vida regalada y ofrecida.
Gracias, Jesús, porque cumples lo que prometes
Quiero dar testimonio de las maravillas que hiciste en mi vida y en la de mi familia
Dios me ama demasiado
Es poco el tiempo que doy a Dios en comparación con lo mucho que él nos ha dado.
A flor de piel
Así se muestran los hombres y mujeres cuyos testimonios de vida quedarán reflejados en los siguientes textos.
Recuerdos de Ypacaraí
Volveré a ti y tú me seguirás dando inocencia, sonrisas, plegarias, transparencia, horizonte y aliento.