
DECÁLOGO PARA PENSAR EL COMPROMISO DE LA IGLESIA ANTE LA CRISIS
En el comienzo está la memoria de la denuncia, no podéis servir a Dios al dinero.
En el comienzo está la memoria de la denuncia, no podéis servir a Dios al dinero.
No se trata de gastar menos para ahorrar más, sino para compartir mejor.
Cuando la crisis comenzaba a manifestarse con toda su intensidad.
La crisis es ética y de sistema y tiene como consecuencia el genocidio de pueblos sobrantes para los negocios de las transnacionales.
Si la muerte de Cristo se recordara como en realidad ocurrió, la Semana Santa tendría que celebrarse de otra manera.
Es necesario definir nuevamente el concepto de bien común
Las leyes contra el blanqueo obligan a los bancos a informarse sobre sus clientes y sobre el origen de sus fondos.
Una colosal inversión a favor de los países pobres. Que será a beneficio de todos, también de los países ricos culpables del actual desastre.