Distintos laicos hacen una breve sugerencia para la vida seglar. Cada uno contempla el Evangelio desde una dimensión de la vida laical.
Distintos laicos hacen una breve sugerencia para la vida seglar. Cada uno contempla el Evangelio desde una dimensión de la vida laical.
Los monjes tienen secretos dignos de ser conocidos, y estos pueden ser inapreciables cuando una pandemia de coronavirus está obligando a millones de nosotros a vivir como monjes.
Distintos laicos hacen una breve sugerencia para la vida seglar. Cada uno contempla el Evangelio desde una dimensión de la vida laical.
Imagínate esto: Tú eres el hijo obediente, y tu madre es viuda y vive en una residencia asistencial. Sucede que tú vives cerca, mientras tu hermana vive por el país, a miles de millas. Así que el peso cae sobre ti para ser el que ayude en el cuidado de tu madre.
Distintos laicos hacen una breve sugerencia para la vida seglar. Cada uno contempla el Evangelio desde una dimensión de la vida laical.
Parece casi contradictorio decir eso. ¿Cómo puede alguien enseñarnos a orar cuando él mismo no sabe cómo? Bueno, dos complejidades conspiraron juntas aquí. Henri Nouwen fue una única mezcla de debilidad, honradez, complejidad y fe.
Cuando el papa Francisco anunció el Año Santo de la Misericordia, prometió que los cristianos podrían ganar una indulgencia especial durante este año.
A veces somos un misterio para nosotros mismos, o quizás, más concretamente, algunas veces no nos damos cuenta de la paranoia que cargamos en nosotros mismos. Tantas cosas pueden arruinar nuestro día.
Mira a los sabios y a los malvados, que se alimentan del fuego sagrado de la vida.
Estos son versos de la canción de Gordon Lightfoot titulada Don Quijote, y destacan una importante verdad: tanto los sabios como los malvados se alimentan de la misma energía.
Cuando yo era niño, había una canción popular cuyo estribillo repetía esta frase: Everyone is searching for Utopia (Todos buscamos la Utopía). Sí, todos la buscamos. Todos nosotros ansiamos un mundo sin límites, una vida en la que nada vaya mal, un lugar en el que no haya tensión ni frustración. Pero eso nunca se da. No existe tal lugar.
Es sorprendente dónde puedes aprender una lección y capturar una ráfaga de lo divino. Recientemente, en una tienda de alimentación, fui testigo de este incidente: Un joven, probablemente de unos 16 años de edad, junto con otras dos chicas de su misma edad, entraron en la tienda.