Hay una serie de axiomas antiguos que sugieren que la virtud y la verdad se encuentran en el medio, entre dos extremos. Esto fue llamado el “justo medio” y se expresa en frases tales como “En medio stat virtus” y “Aurea mediocritas.
Hay una serie de axiomas antiguos que sugieren que la virtud y la verdad se encuentran en el medio, entre dos extremos. Esto fue llamado el “justo medio” y se expresa en frases tales como “En medio stat virtus” y “Aurea mediocritas.
Todos vivimos con ciertas lamentaciones y con la amarga conciencia de que si tan solo hubiésemos puesto mas atención ó sido pacientes ó valientes ó amorosos en un determinado momento, nuestras vidas pudieran ser ahora muy diferentes.
Hay un adagio que dice que un ateo es simplemente alguien quien no puede comprender la metáfora. Thomas Halik, el escritor Checo, sugiere que más bien un ateo es alguien quien no es suficientemente paciente con Dios.
No es fácil discernir la voz de la verdad entre las muchas voces que nos llaman. De hecho, es difícil incluso discernir cuando somos auténticamente sinceros: ¿Quién soy realmente? ¿Cuál es mi verdadero y genuino interés?
Cada año escribo un articulo sobre suicidio porque mucha gente tiene que vivir con el dolor de perder a un ser querido de esta forma.
Hace ochocientos años, el poeta, Rumí escribió: Lo que quiero es saltar fuera de esta personalidad y después sentarme aparte. He vivido demasiado tiempo en donde puedo estar accesible.
La calidad de nuestras personas depende de la calidad de nuestra integridad privada.
El suicidio, es una enfermedad, no un pecado.
El sol es espléndidamente generoso, al entregar enormes porciones de sí mismo cada segundo.
Hay una pregunta sobre la bondad de Dios tan vieja como la religión misma: ¿Cómo puede un Dios que es todo bondad enviar a alguien al infierno para toda la eternidad?
Ricos y los pobres se arrodillan juntos, unos al lado de otros, todos iguales.