El Secreto de una Celda Monacal
Haced con entusiasmo y fidelidad lo que el deber os pide, y eso os va a enseñar lo que necesitáis para saber llegar a Dios.
El Odio y el Evangelio
León Tolstoy dijo una vez: ‘Solo hay un camino para acabar con el mal, y ése es devolver bien por mal’.
El Misterio de Dar y Recibir Espíritu
Cuando alguien nos deja físicamente, tenemos luego la oportunidad de percibir y acoger su presencia de un modo más profundo.
O místicos o descreídos
Karl Rahner afirmó que llegaría un tiempo en el que cada uno de nosotros sería o un místico o un descreído.
El Cristo Anonadado y el Cristo Triunfal
Cristo que se vacía de sí mismo para convertirse en esclavo o Cristo que resucita triunfante sobre la muerte.
26 años ‘En EXILIO’
En cada columna he intentado, a mi humilde manera personal, traer de vuelta al hogar a algún desterrado, a algún ‘exiliado’.
Ojos de amor… para ver la primavera y la Pascua
Cuando tenía yo veintitantos años, pasé un año como estudiante en la Universidad de San Francisco. Justamente acababa de ordenarme sacerdote e intentaba sacar un título de posgrado en teología.
Resurrección: Sobreviviendo a Nuestras Crucifixiones
Cada sueño, cada ideal, al final acaban crucificados. ¿De qué modo? Por el tiempo, las circunstancias, la envidia; y por ese dictado curioso y perverso –de alguna manera innato en el orden de las cosas– que asegura que hay siempre alguien o algo que no puede partir a gusto a solas, sino que, por razones muy suyas, tiene que partir cazando, persiguiendo y golpeando a lo que es bueno.
Jesús, Solo, a un Tiro de Piedra de Todos
La verdad se nos hace encontradiza de diferentes maneras. A veces aprendemos lo que algo significa, no en el aula o en la clase, sino en un hospital.
Temor Santo y No-santo
No todo temor se crea y desarrolla igual, al menos no en el ámbito religioso. Hay un miedo que es saludable y bueno, signo de madurez y de amor. Como hay también un miedo malo, que bloquea la madurez y el amor. Pero esto hay que explicarlo.
Buscando a Dios entre Muchas Voces
Estamos rodeados por muchas voces. Rara vez hay un momento en nuestra vida, durante el día, en el que alguien o algo no nos esté llamando, y en el que, aun en las horas de sueño, los sueños y pesadillas no llamen nuestra atención.







