Miércoles de la XXIV Semana del Tiempo Ordinario
Lc 7, 31-35. Hemos tocado la flauta y no habéis bailado, hemos entonado lamentaciones, y no habéis llorado.
Mc 7, 1-13. Dejáis a un lado el mandamiento de Dios para aferraros a la tradición de los hombres.