Liturgia Viva del VI Domingo de Pascua
SEXTO DOMINGO DE PASCUA (Ciclo B)
- Amor sin Límites ni Fronteras
- Como Yo Les He Amado
Saludo (Ver la Segunda Lectura)
El amor viene de Dios
y todos los que aman
han nacido de Dios y conocen a Dios.
Que Jesús, el Hijo de Dios,
que nos dio a conocer su amor,
esté siempre con ustedes.
Introducción por el Celebrante (Dos Opciones)
- Un Amor sin Límites ni Fronteras
Hoy se nos recuerda de nuevo que el corazón del cristianismo es el amor: Amor a Dios, amor de unos para con otros. Jesús nos dice que tenemos que amarnos unos a otros como él nos ha amado. Éste es un amor muy exigente, ya que nos compromete a amar no sólo a los que nos caen bien y que nos aman o son compañeros cristianos de las mismas ideas, sino también a los difíciles, a los “no atrayentes”, a gente muy lejos de ser perfecta, a marginados y extraños… Eso no es tan fácil, y esa es probablemente la razón por la que él lo llama “mandamiento”. Pidamos al Señor en esta eucaristía que crezcamos en esta apertura de auténtico amor. - Como Yo Les He Amado
Con frecuencia nos sorprendemos de lo inventivo que puede ser el amor y de descubrirlo donde menos lo esperábamos. Causa sorpresa el que un marido adusto propicie a su esposa un gesto impredecible de ternura, o el que una pareja que vive en sector de chabolas adopte a un niño encontrado abandonado en la calle. El amor de Dios, siempre sorprendente y asombroso, es la fuente de todo eso. Nos lo muestra él cuando renuncia a su propio Hijo por nosotros. Jesús siguió mostrándonos una forma humana al amor de Dios, cuando se preocupó por la gente y dio nuevas oportunidades incluso a marginados y proscritos, a los no amados y a los “no atrayentes”. Hoy nos convoca a nosotros, sus amigos, y nos dice: “Ámense unos a otros como yo les he amado”. Con estas palabras nos reta ahora, en esta eucaristía.
Acto Penitencial
Estamos todavía lejos de amar a los hermanos
como Jesús quiere que les amemos.
Pidamos al Señor y a los hermanos que nos perdonen.
(Pausa)
- Señor Jesús, tú nos has amado como el Padre te ha amado a ti.
Guárdanos en tu amor: R/. Señor, ten piedad de nosotros. - Cristo Jesús, el modo como nos has amado consiste en que entregaste tu vida por nosotros.
Haz que vivamos y nos desvivamos los unos por los otros:R/. Cristo, ten piedad de nosotros. - Señor Jesús, tú amaste a los débiles, a los pecadores, a los que es difícil amar:
Suscita nuestro amor y hazlo como el tuyo:R/. Señor, ten piedad de nosotros.
Por tu bondad, perdónanos, Señor, y haz que nuestra característica como pueblo tuyo
sea un amor siempre entregado y comprometido.
Y llévanos a la vida eterna.
Oración Colecta
Pidamos al Padre que no permita
que pongamos límites ni fronteras a nuestro amor.
(Pausa)
Oh Dios bondadoso:
Tu nombre es AMOR
y tú nos lo has revelado en toda su profundidad
cuando enviaste a tu Hijo al mundo
para ser sacrificado por nuestros pecados.
Por medio de Jesús, que nos llama sus amigos,
haz nuestro amor tan fuerte como la vida y la muerte;
que el amor tenga siempre la última palabra en nosotros
y que sepamos compartirlo gratis, como tú lo hiciste.
Que permanezcamos siempre en tu amor
y nos amemos unos a otros como Jesús nos ha amado,
él que es nuestro Salvador y Señor
por los siglos de los siglos.
Primera Lectura (Hch 10, 25-26, 34-35, 44-48): El Amor de Dios Abierto a Todos
La señal que Dios da a Pedro y a la Iglesia de que acepta y ama a los creyentes que proceden del paganismo es que el Espíritu Santo desciende también sobre paganos.
Segunda Lectura (1 Jn 4, 7-10): Dios Nos Ama; Nosotros Nos Amamos Unos a Otros
Dios nos amó de tal manera que su amor tomó forma humana en Jesucristo. Desde entonces, nuestro amor hacia el otro es la señal del amor de Dios y de su presencia en medio de nosotros.
Evangelio (Jn 15, 9-17): Ámense Unos a Otros como Yo Les He Amado
Jesús nos ama y quiere que permanezcamos en su amor y alegría guardando sus mandamientos de amor mutuo.
Oración de los Fieles
Ya que Jesús es nuestro amigo, podemos encomendarle todos aquellos a quienes amamos y presentarle confiadamente las necesidades de aquellos a quienes deberíamos aprender a amar. Y digamos:
R/. Señor, danos el don del amor.
- Señor Jesús, haz que en la comunidad de tu Iglesia haya amor, amistad y confianza, entre sus líderes y los fieles, y así te decimos:
- Señor Jesús, que haya amor y amistad entre todas las personas y las iglesias que afirman que tú eres su Señor y Pastor; que lleguen a ser realmente uno en ti, y así te decimos:
- Señor Jesús, que el amor y la amistad reine en todas nuestras comunidades de religiosos, para que todos sus miembros sean excelentes testigos de tu amor, y así te decimos:
- Señor Jesús, que el amor y la amistad reine en todas las familias cristianas, para que los padres y sus hijos sean células vivientes de las que crezca en nuestro mundo comprensión y amor, y así te decimos:
- Señor Jesús, que haya entre nosotros amor y amistad que abran nuestros ojos, manos y corazones a las necesidades y a las personas de los enfermos y de los que viven en soledad, de los pobres y de las víctimas de la injusticia, y así te decimos:
- Señor Jesús, que haya amor y amistad en todas nuestras comunidades cristianas, para que la gente llegue a creer en ti cuando vea cómo nos amamos unos a otros, y así te decimos:
- Señor Jesús, amigo nuestro, queremos permanecer en tu amor y con él darnos calor humano unos a otros, pues tú eres Señor y Salvador nuestro por los siglos de los siglos.
Oración de Ofertorio
Señor Dios nuestro, Padre amoroso:
Tu amor se nos mostró con rostro humano
en tu Hijo Jesucristo.
Él nos mostró toda la profundidad de tu amor y del suyo propio
entregando su vida por nosotros, sus amigos.
Mientras se da a sí mismo por nosotros como pan de vida,
que él sea nuestro alimento
en el camino de la vida y del amor,
no sólo cuando es fácil amar,
sino también cuando resulta difícil ser fiel
y cuando el amor exige mucho sacrificio.
Te lo pedimos por Jesucristo nuestro Señor.
Introducción a la Plegaria Eucarística
Alcemos nuestros corazones y nuestras voces a nuestro Padre bondadoso por habernos amado antes de que nosotros pudiéramos amarle. Con Jesús, signo máximo del amor de Dios hacia nosotros, ofrezcamos al Padre nuestro deseo y voluntad de dejar que su amor se derrame sobre todos los hermanos.
Introducción al Padrenuestro
Con Jesús, nuestro hermano,
oremos juntos a nuestro Padre del cielo
que nos ama con un amor tan grande
que nos dio a su propio Hijo:
R/. Padre nuestro…
Líbranos, Señor
Líbranos, Señor, de todas formas de egoísmo
que nos cierra a nuestros hermanos.
Mantennos libres de todo pecado
que pusiera en peligro el amor entre nosotros
y concédenos la paz de la unidad.
Haznos atentos y abiertos a todos,
mientras esperamos con gozosa esperanza
la venida gloriosa de nuestro Salvador Jesucristo,
R/. Tuyo es el reino…
En el Saludo de Paz
Que el saludo de paz que nos damos hoy sea expresión de nuestro genuino amor mutuo, y que a ella sigan muchos otros signos, gestos y detalles de amor en la vida diaria.
Que la paz del Señor esté siempre con ustedes.
Invitación a la Comunión
Éste es nuestro Señor que dijo:
“Ámense unos a otros como yo les he amado”.
Dichosos nosotros invitados a la mesa del Señor,
mesa de amor y de unidad.
R/. Señor, no soy digno…
Oración después de la Comunión
Oh Dios y Padre nuestro:
En esta celebración eucarística
nos has dado una nueva prueba de tu amor
al darnos a tu Hijo y a su Espíritu.
Jesús ha fortalecido nuestro amor.
Acepta, Padre, nuestra acción de gracias
y suscita lo mejor en nosotros,
para que demos rico fruto
de amor confiable y fiel.
Que tu Santo Espíritu nos una
para construir comunidad todos juntos
y vivir en tu amor y alegría
ahora y por los siglos de los siglos.
Bendición
Hermanos: Sabemos que Dios nos ama
y que quiere vivir entre nosotros.
Él nos llama sus amigos, sus escogidos.
Respondamos a su amor sin medida.
Estamos seguros de que amamos a Dios
y que él está presente entre nosotros
cuando nos amamos unos a otros.
Que Dios nos dé la fuerza para hacerlo.
Y para ello, que la bendición de Dios todopoderoso,
Padre, Hijo y Espíritu Santo
descienda sobre nosotros y nos acompañe siempre.