Comentario al Evangelio del día 4-09-2025
¡Aún dicen que el pescado es caro! es una cuadro pintado por el artista español Joaquín Sorolla en el año 1894. Retrata a un pescador herido que es atendido por un compañero. Nos hace pensar en los peligros del mar y en cómo los pescadores arriesgan su vida en él. Porque el mar no es solo la visión beatífica del mar en calma en un amanecer. El mar es también el momento de la tormenta, de las olas que suben por encima de los barcos y que tantas veces han dado con ellos, y con su tripulación, en el fondo del mar. El mar no es para tomárselo a broma.
Unos cuantos de los discípulos de Jesús eran pescadores en el mar de Galilea. Es un lago grande pero que también tiene auténticas tormentas que, es de suponer, ponían en peligro las barquillas que en aquellos tiempos podían usar los pescadores. Allí habían estado toda la noche bregando y no habían conseguido nada. Pero a la indicación de Jesús, volvieron a echar las redes.
Sin duda, que el evangelista nos está hablando de otras redes y otra pesca. Sin duda, que está hablando del trabajo de los misioneros, de los que después de la resurrección fueron, y van, por los caminos del mundo anunciando con sus palabras y con sus hechos, el reino. No siempre se pesca. Ni siquiera siempre consiguen que les escuchen (así le sucedió a Pablo en Atenas, Hechos 17,16-34). Pero ellos no cejan porque se sienten llamados a esa misión: anunciar el reino de Dios, el amor y la misericordia de Dios para todos los hombres y mujeres, sin excepción, sin excluir a nadie. Y siguen echando la red, anunciando el reino, en el nombre de Jesús.
Pero misioneros no son solo los que van a países lejanos, dejando su tierra. Misioneros somos todos porque todos estamos llamados a dar testimonio del Dios de Jesús. También aquí y ahora, en nuestras oficinas, en nuestras familias, con los vecinos y amigos. A veces será sin palabras, solo con nuestra forma de actuar como personas honestas y siempre atentas a las necesidades de los demás. Como Dios mismo haría en nuestro lugar.
Fernando Torres, cmf