Un buen día de 2005 , David Barrins , un exitoso corredor irlandés del mercado de divisas abandona una vida de lujo en el centro financiero de Dublín para seguir la llamada de Dios y convertirse en fraile dominico.

Un buen día de 2005 , David Barrins , un exitoso corredor irlandés del mercado de divisas abandona una vida de lujo en el centro financiero de Dublín para seguir la llamada de Dios y convertirse en fraile dominico.
A los 16 años escuchó la llamada de Dios. Esta carmelita se aferró a la guitarra y a la música para difundir la palabra del Señor. Admite que la Iglesia tiene que evolucionar y pide mayor igualdad entre mujeres y hombres.
María Teresa Martínez Vallvey, una edil de UPN en Navarra, acaba de renunciar a su plaza de enfermería después de años de estudio y tres oposiciones porque ha sentido que Dios la quiere «para Él». Dejará su puesto en un hospital público para ingresar en las Misioneras de la Caridad
Un buen día de 2005 , David Barrins , un exitoso corredor irlandés del mercado de divisas abandona una vida de lujo en el centro financiero de Dublín para seguir la llamada de Dios y convertirse en fraile dominico.
A los 16 años escuchó la llamada de Dios. Esta carmelita se aferró a la guitarra y a la música para difundir la palabra del Señor. Admite que la Iglesia tiene que evolucionar y pide mayor igualdad entre mujeres y hombres.
María Teresa Martínez Vallvey, una edil de UPN en Navarra, acaba de renunciar a su plaza de enfermería después de años de estudio y tres oposiciones porque ha sentido que Dios la quiere «para Él». Dejará su puesto en un hospital público para ingresar en las Misioneras de la Caridad