Liturgia Viva del Jueves de la 17ª semana del Tiempo Ordinario

Dios está donde está el pueblo

Oración Colecta

Oh Dios de ternura y misericordia, siempre fiel:
Tú quieres que seamos tu Pueblo en marcha
con Jesucristo tu Hijo, hacia el nuevo futuro
de justicia y amor de tu reino.
No permitas que nos sofoquemos
contentándonos con viejos hábitos
y lentos movimientos.
Ayúdanos a aceptar el dolor
de dejar a nuestra espalda lo que nos es familiar
y a abrirnos al nuevo reto del evangelio,
de llegar a ser más semejantes a tu Hijo
que guía nuestros pasos vacilantes:
Jesucristo nuestro Señor.

Intenciones
  • Por la Iglesia, para que sea una voz y una fuerza que promueve la justicia y el amor entre la gente y entre las naciones, roguemos al Señor.
  • Por los políticos y economistas de nuestros días, para que reformen las estructuras nacionales e internacionales, y así poder dar acceso a todos, de forma equitativa, a los tesoros materiales, culturales y espirituales de nuestro mundo, roguemos al Señor.
  • Por todos nosotros, para que sepamos vivir en las manos de Dios y dejarle que, incluso a través de pruebas, nos moldee como mejores cristianos, roguemos al Señor.
Oración sobre las Ofrendas
Señor Dios nuestro:
Celebramos con pan y vino
la Alianza que renuevas con nosotros
en la sangre de Jesucristo.
Transfórmanos en tu pueblo nuevo y fiel
unidos a ti en una perenne unión de amor.
Renueva nuestros corazones,
cámbianos en nuevo vino de alegría y esperanza
para que reconstruyamos hoy este mundo
y marchemos con tu hijo hacia tu nuevo cielo
donde tú serás nuestro Dios para siempre.
Te lo pedimos por Jesucristo nuestro Señor.

Oración después de la Comunión
Oh Dios de esperanza:
Tú nos has dado a Jesucristo tu Hijo
como nuestro compañero de camino
para que podamos entender
las antiguas cosas familiares
con un corazón nuevo y joven;
y para renovarnos a nosotros y al mundo.
Que él mismo nos empuje hacia adelante
cuando tendemos a transigir
simplemente poniendo parches en lo viejo.
Que Jesús frene un poco nuestras impaciencias
cuando intentamos meter prisa a la gente
más allá de su capacidad de crecimiento.
Llévanos hacia adelante guiados siempre por él,
en quien plenamente confiamos:
Jesucristo nuestro Señor.

Bendición
Hermanos: Tenemos que hacer visible al Señor hoy con formas que nuestro tiempo entienda. Y tenemos que hacer de nuestro mundo, cada vez más, el mundo y el reino de Dios. Que ustedes puedan realizarlo con la bendición de Dios todopoderoso, Padre, Hijo y Espíritu Santo.