Son de dos clases: los que pertenecen a falsas religiones, y los que equivocadamente pretenden hablar en nombre Dios.

Son de dos clases: los que pertenecen a falsas religiones, y los que equivocadamente pretenden hablar en nombre Dios.
Son de dos clases: los que pertenecen a falsas religiones, y los que equivocadamente pretenden hablar en nombre Dios.