Causas y efectos de la condena a muerte a Asia Bibi

24 de julio de 2015
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En julio de 2009 Asia Bibi estaba trabajando en un campo agrícola en Pakistán. Tuvo sed y bebió agua de un pozo. Una mujer le recriminó que lo hiciera, porque estaba contaminando un agua que era de las mujeres musulmanas.

Tras una discusión entre las mujeres acusaron a Asia Bibi de blasfemia contra el islam. ¿Qué significa eso y qué repercusión tiene?

En Pakistán rige la Shari’a o reglas jurídicas basadas en el Corán que regulan toda la vida individual, familiar, económica, social y política del musulmán. En la interpretación radical de esta norma ningún buen musulmán tolera a un blasfemo y el que lo mata va al Paraíso.

A Asia Bibi se le ofreció abjurar de su fe y hacerse musulmana, para liberarse de la acusación de blasfemia.

"Prefiero morir cristiana que salir de prisión siendo musulmana", respondió ella.

En 2010 fue condenada a la horca. La presión internacional retrasó la ejecución. En 2014 se confirmó la sentencia y hoy se celebra el último recurso.

Algunos líderes islámicos han puesto precio a su cabeza, prometiendo 5000 dólares a quien la mate. De hecho en estos años ya han matado al gobernador de Pendjab ( musulmán) y al ministro de las minorías (cristiano) por defenderla.

El testimonio de esta gente perseguida debería facilitar que tengamos un corazón generoso. Desde Ayuda a la Iglesia Necesitada y otras Instituciones religiosas nos piden ayuda material para ayudarles a defenderse. Y oración, para ayudarles a llevar su cruz.

El papa Francisco ha dicho de los cristianos perseguidos: “Ustedes son hoy los juncos de Dios. Los juncos que se abajan con este viento feroz, pero luego resurgirán”.

Estos cristianos perseguidos han tocado mi corazón y han impactado en él. Han tocado mi razón, que me dice que no puedo ser espectador pasivo de lo que está ocurriendo. Y han tocado mi alma que se halla, ya, hermanada con ellos.

Ojalá que el fruto de este hermanamiento sea el compromiso sociopolítico para rechazar los fundamentalismos que afirman una fe sin razón o contra la razón. Y para armarnos de valor, de esperanza y de convicción para lograr que los musulmanes “de bien” condenen, se mojen y se movilicen.

 


Extraído del Blog "Creyentes y Responsables"