Severino María Alonso, cmf - Palabras menores el jueves, 18 de octubre de 2007
La fe cristiana es, ante todo, un don, un regalo inmerecido y gratuito. Un don que, por la benevolencia de Dios, se ofrece a todos, pero que no se impone a nadie.
Severino María Alonso, cmf - Palabras menores el jueves, 11 de octubre de 2007
Las palabras han dejado ya de ser, muchas veces, instrumentos de comunión y de comunicación entre los hombres, y se han convertido, con frecuencia, en medios especialmente aptos para el engaño y hasta para el chantaje.
Severino María Alonso cmf - Palabras menores el jueves, 13 de septiembre de 2007
Cuando hablamos de los derechos de la persona, y más concretamente de los derechos del religioso, que la autoridad debe defender y promover, se hace necesaria una distinción o un esclarecimiento conceptual, para evitar peligrosas y frecuentes confusi
Severino María Alonso cmf - Palabras menores el martes, 4 de septiembre de 2007
El profeta no es, propiamente, un adivino, ni un hombre que predice el futuro, que anuncia lo que va a suceder. Es éste un aspecto secundario de la vocación y de la misión profética. Profeta, en sentido riguroso, es el que habla en nombre y en lugar de ot
Severino-María Alonso, cmf - Palabras menores el jueves, 2 de agosto de 2007
Todas las numerosas visitas salvadoras de Dios a su Pueblo culminan en la grande y definitiva Visita que se llama Jesús, que es el Emmanuel, el Dios-con-nosotros para siempre.
Severino-María Alonso, cmf - Palabras menores el jueves, 26 de julio de 2007
La pobreza, el pobre, es un tema fundamental de continuidad entre el Antiguo y el Nuevo Testamento y, quizás, la línea más pura y genuina de su espiritualidad.
Severino-María Alonso, cmf - Palabras menores el jueves, 14 de junio de 2007
Para vivir de verdad una auténtica vida cristiana, se necesita un núcleo vivo, un eje diamantino en torno al cual gire toda la existencia. Un centro ordenador de la vida entera.
Sin El, Dios está lejos; Cristo se encuentra en el pasado; el Evangelio es letra muerta; la Iglesia, una simple organización; la autoridad, despotismo; la misión, propaganda; el culto, una evocación; y la vida cristiana, una moral de esclavos.