Bombay (Agencia Fides) – Los Obispos indios han hecho una dura condena por el terrorismo que acaba con vidas inocentes, después de los atentados que el 11 de julio devastaron la ciudad de Bombay (Mumbai) y la ciudad de Srinagar en Kashmir. Siete explosiones, acontecidas en diversos convoys ferroviarios en Bombay, han causado más de 190 muertos y unos 700 heridos.
La acción no ha sido reivindicada, pero fuentes judiciales consideran que los ataques son obra de los guerrilleros separatistas de Kashmir, el grupo islámico “Lashkar-e-Taiba” (LeT, “La armada de los puros”), activo en territorio pakistaní el cual, sin embargo, ha negado implicación alguna con los atentados. También en Kashmir la explosión, realizada casi en forma contemporánea, de algunas granadas, ha matado a siete personas en la ciudad de S! rinagar, provocando varios heridos.
Hoy, mientras que en todo el país está en vigor el estado de máxima alerta, Bombay trata de volver a la normalidad. En la megalópolis de 17 millones de habitantes se esperan las máximas diligencias por parte del Estado. El mundo entero ha condenado el atentado, Pakistán incluido, acusado por algunos sectores del gobierno indio de ayudar al grupo considerado responsable de las bombas. El Cardenal Ivan Dias, Prefecto de la Congregación para la Evangelización de los Pueblos, y ex-Arzobispo de la Archidiócesis de Bombay, envió un telegrama al administrador de la Diócesis de Bombay, Mons. Bosco Penha (ver texto integral en otro artículo de la Agencia Fides).
La Conferencia Episcopal India (Cbci) intervino a través de su Secretario General, el Arzobispo Estanislao Fernández: “Condenamos fuertemente estas acciones. Nuestra Conferencia le está fuertemente disgustada por el hecho de que algunas personas quieran usar estos métodos extremos para resolver sus problemas, destruyendo vidas inocentes y dañando la propiedad del estado”.
El Presidente de los Obispos indios, Mons. Oswald Gracias, añadió estar conmocionado por tal inaudita violencia, afirmando “El terror no puede encontrar lugar en una sociedad civilizada. El recurso al terror como medio para expresar cualquier queja no es nunca justificable”. A nivel local Mons. Bosco Penha expresó también él una dura condena, expresando su condolencia a las víctimas.
Agencia Fides 12/7/2006
