BHUBANESWAR, India (UCAN) – Lideres eclesiales han pedido la intervención del gobierno federal de la India para acabar con la continua violencia anticristiana en el estado oriental de Orissa que ha costado ya la vida a dos personas desde el 24 de Diciembre.
Organizaciones cristianas en Nueva Delhi se han unido para apelar ante el Primer Ministro Monmohan Singh para que intervenga y alivie el temor de las comunidad Cristiana. Esta solicitud venio acompañada de los reportes de cristianos huyendo de sus pueblos hacia la jungla y sacerdotes y monjas escondiéndose de los ataques perpetrados contra ellos por los radicales hidúes.
La explosion de violencia comenzó el 24 de Diciembre en Bamunigam, y pronto se extendió por otras partes del distrito de Kandhamal, a 335 kilómteros al sudeste de la capital del estado de Bhubaneswar.
La escalada de violencia dio como resultado la muerte de dos cristianos y 30 Iglesias y otros centros cristianos atacados. Los extremistas hindus usaron espadas, estacas de madera y barras de hierro en sus ataques. Destruyeron puertas y ventanas de la Iglesia y les prendieron fuego, además de incendiar algunas casas de cristianos y comercios.
“Nos gustaría que tomara medidas inmediatas respecto a la violencia que se ejerce contra una comunidad minoritaria amante de la paz de manera que la paz se restablezca lo antes posible”, dice el memorándum presentado. El Arzobispo de Delhi, Vicente Concessao, presidente del National United Christian Forum, estaba entre los líderes católicos y protestantes firmantes del documento.
La Conferencia Espicopal Católica de la India, en una rueda de prensa, sijo que la violencia ha sorprendido a los obispos. La Iglesia “está siendo herida profundamente”, añadieron, desde que los días 25 y 25 de Diciembre, “un tiempo en el que nosotros celebramos la paz y la armonía de la Navidad”.
“Estos ataques contra cristianos en el día de Navidad parece sugerir un planeado esfuerzo poir romper la paz de la comunidad por parte de algunos elementos mal aconsejados y antisociales”, afirmaron los obispos.
El Padre Tony Raj, sacerdote jesuita que traba en Orissa, declaró a UCA News el 26 de Diciembre que algunos de sus compañeros de las areas afectadas de Baliguda y Phubani •están desaparecidos y no se sabe dónde están”. “Tenemos constancia que algunos están heridos”.
El padre Raj continuo: “Este es un ataque planeado. Informes dicen que somos atacados porque nosotros convertimos a la gente por la fuerza. ¿Dónde están las conversiones? Este un el argumento sin base alguna”.
El reverendo Paul Raj, un protestante, afirma que una casa para ancianos y huerfanos fueron atacadas en el distrito de Phulbani. “Antes de abandonar los lugares fueron advertidos de no realizar ninguna clase de celebración navideña,” dijo el pastor a UCA News el 26 de Diciembre.
“En torno a 30 jóvenes montados en motocicletas y sosteniendo banderas color azafrán se lanzaron contra el hogar de ancianos. Rompieron ventanas y bombillas”, denunció en reverendo Raj. Dijo que tenía información de que esos mismos jóvenes habían atacado la casa que los Misioneros de la Caridad para enfermos de tuberculosis, a sólo unos pocos kilómetros de allí.
Los lideres cristianos a lo largo y ancho de la India han condenado los ataques y solicitado que se actúe en contra de loa alborotadores en Orissa, que está siendo gobernada por una coalición de un partido regional y el pro Hindú Bharatiya Janata Party (BJP, El partido de la gente de India). El BJP es considerado el brazo político de los grupos que quieren hacer de la India un estado teocrático.
El Arzobispo Raphael Cheenath de Cuttack-Bhubaneswar, a cuya archidiócesis pertenece el área afectada, envio un memorándum al jefe de gobierno del estado pidiendo su intervención para generar confianza entre los cristianos.
Mientras tanto, el Foro Católico Secular en Bombai, al oeste de la India, la planeado una sentada el 27 de Diciembre como protesta por la violencia. El programa de protestas ha sido organizado junto con otros grupos cristianos de la ciudad, según el foro afirmó en una rueda de prensa.
